(extracción de petróleo VS cuidado de la Madre Tierra)
A pesar de que la salud del planeta está en jaque, los políticos mexicanos se preocupan más por facilitar enormes negocios a las petroleras en lugar de proteger el futuro de su país
Las más importantes compañías
petroleras del mundo, se aprestan a competir por la obtención de las
ganancias derivadas de la extracción del petróleo existente en la
profundidad de los mares mexicanos. Se trata de un gran negocio, el
favorito del capitalismo.
La ciencia sugiere que el próximo paso
en la evolución humana estará marcado por la conciencia de que todos
somos células interdependientes dentro del súper organismo llamado
humanidad. La Tierra también es un organismo vivo: Gaia para los griegos, Tonantzin para los náhuatl, Pachamama
para los quechua. La adaptación de los seres humanos al medio ambiente y
el aprovechamiento de los recursos naturales debe hacerse sin la
destrucción de los ecosistemas.
El progresivo calentamiento del planeta
a consecuencia de usar el petróleo como principal fuente de energía, es
menor comparado a los terremotos y tsunamis causados por el fracking –facturación hidráulica– para agotar los mantos petroleros aún existentes. Lo has visto en las noticias. Las consecuencias del fracking
en suelo mexicano, pueden llegar a tener repercusiones ambientales en
todo el planeta. Nuestro país se encuentra en una zona altamente
sísmica.
En el caso concreto de México, no sólo
se requiere suspender la proliferación de las perforaciones a nivel
profundo para la extracción de petróleo y de gas, sino replantear la
utilización de la gasolina, para substituirla por otras fuentes
generadoras de energía que ya existen y cuyo uso no se generaliza, tan
sólo por no afectar los intereses de grandes empresas trasnacionales.
Es un asunto puramente material –de
mecanismos mediante los cuales una burguesía global administra sus
recursos– y va más lejos que un asunto moral o una construcción de
pensamiento como la Patria. Es una amenaza de repercusiones mundiales y
por lo tanto requiere de soluciones globales y no simplemente locales,
como en el pasado. Los grupos políticos que nos representan, fracasaron
en su intento por detener la Reforma Energética que permitirá la
destrucción de los ecosistemas de nuestra Tierra, al dedicarse a crear
conciencia económica, no espiritual. Representa el fracaso total de la
política actual.
La patria de nuestro esqueleto se
encuentra en la Tierra y es a ella a quien debemos sanar, proteger y
soñar. No las ganancias económicas que nos pueda traer una empresa que
funciona en contra de la salud del planeta. Por mucho dinero que genere.
La ciencia también ha llegado a
conclusiones alarmantes. El geofísico Brad Werner advierte que el
capitalismo global ha logrado agotar los recursos de una manera tan
rápida, cómoda y sin barreras, que “los sistemas de tierra-humana” se
están convirtiendo peligrosamente inestables en respuesta. Cuando un
periodista insiste: “¿Ya nos chingamos?” Werner responde “Más o menos.”
La única dinámica en su modelo que
ofrecía algo de esperanza, es lo que Werner calificó como “resistencia” –
movimientos de personas o grupos de personas que “adopten un
determinado conjunto de dinámicas que no encaja dentro de la cultura
capitalista” –según el resumen de su presentación, esto implica: “acción
directa ambiental, resistencia tomada de fuera de la cultura dominante,
así como protestas, bloqueos y sabotajes de los pueblos indígenas,
obreros, anarquistas y otros grupos de activistas.”
Lo que está diciendo es que todavía hay
tiempo para evitar una catástrofe, pero no dentro de las reglas del
capitalismo como está construido actualmente. Lo cual puede ser el mejor
argumento que hayamos tenido para cambiar esas reglas.
Tenemos tiempo para rescatar la Tierra.
Pero no dentro de las reglas del sistema político mexicano. Y esta es la
mejor noticia, porque es el mejor argumento que hemos tenido para
desmantelar a esta clase política corrupta, que ha empeorado no sólo
nuestra calidad de vida con su promesa de amor al pasado, sino también
han terminado siendo cómplices del sistema global por su incapacidad de
articular una resistencia, de acuerdo al urgente cambio de paradigma.
De acuerdo con Daniel Pinchbeck:
La forma de anular
el poder corrupto del Estado es desarrollando un plan de acción, una
estrategia flexible, con el fin de transformar el sistema
corporativo/financiero de tal manera que funcione en beneficio de todos.
Esto incluye el desmantelamiento del complejo industrial militar y la
pacificación el estado policial. Esto se logra a través del desarrollo y
la creación rápida de prototipos para un nuevo sistema operativo social
que prometa subsidios universales, justicia económica y social y la
rápida distribución de tecnologías regenerativas que apoyen la autonomía
local y la salud ecológica. El proceso de transformación de nuestra
civilización global requerirá una serie de pasos que se pueden definir y
planear de forma explícita. Estos pasos incluyen una campaña en medios
de comunicación, educación gratuita sobre el nuevo paradigma y un
programa de formación global para promover habilidades necesarias, como
el compostaje, plantación de árboles, la recolección de agua de lluvia y
la comunicación no violenta. Ya sea que tarde diez o doscientos años,
el objetivo es disolver la actual civilización global – basada en la
dominación y el control – para formar una cooperativa voluntaria, la
regla de todos para todos.
Gracias entonces, señores políticos, por
darnos el mejor argumento para re-inventar el mundo con urgencia.
Ahora, quítense del camino de la evolución, que no tenemos mucho tiempo.
Twitter de la autora: @Sandrástica